15 DE JULIO. EFEMÉRIDES NAVARRAS.
*1243.
Alvar Pérez de Azagra dio en arras, a su mujer Inés, hija del rey Teobaldo I de Navarra, la villa de Santa Eulalia (Teruel) un 15 de julio de 1243.
*1458.
Carlos Príncipe de Viana, en la pugna y enfrentamiento por sus derechos dinásticos son su padre Juan II, intentó ganarse el respeto a su causa de otros reyes y papado. Tras un fracasado intento por obtener la ayuda de Carlos VII de Francia y del papa Calixto III, el príncipe llegó finalmente a Nápoles y puso oficialmente (30.6.1457) todos sus asuntos en manos del rey Alfonso y de Aragón, arbitraje que Juan II aceptó (6.12.1457) liberando los rehenes que conservaba desde 1453. La inesperada muerte del rey de Aragón (27.6.1458) impidió la solución arbitral esperada, hizo a Juan II rey de Aragón y al príncipe heredero de todos los estados de esta Corona. Mientras proseguían las negociaciones con el rey, Carlos, que el año anterior había sido proclamado rey por los de su facción, pasó a Sicilia el 15 de julio de 1458, desde donde sometió su caso a las autoridades catalanas y donde fue acogido con interés y simpatía por los habitantes de la isla, descontentos del alejado gobierno aragonés. De Sicilia se encaminó a Cerdeña
*1563.
Pedro de Navarra, natural de Estella, también llamado Pedro de Albret o Labrit, hijo natural de Juan de Albret, último rey de Navarra, y de María de Ganuza, vecina de Estella. Estudió en el monasterio benedictino de Irache, Estella, San Pedro de Cardeña y Sahagún. En 1512, año de la conquista de Navarra por las tropas de Fernando el Católico, pasó con Juan y Catalina, al Bearne. Unos años más tarde asistió como alumno a un centro literario que se reunía en la casa de Hernán Cortés, en Valladolid, donde hacia el año 1540 tuvo un hijo natural, al que se le conoce como Basilio de Labrit y Navarra. En Francia concurrió (1544) a la Academia de su primo el cardenal Jorge de Armagnac.
Tres aspectos abarcan su actividad pública: recobrar el reino de Navarra para su hermano y para sus sobrinos; su inconformismo con Juana de Albret, debido al fanatismo hugonote de ésta, y su actividad literaria.
Tres aspectos abarcan su actividad pública: recobrar el reino de Navarra para su hermano y para sus sobrinos; su inconformismo con Juana de Albret, debido al fanatismo hugonote de ésta, y su actividad literaria.
Grandes fueron los trabajos que se tomó para que, primeramente su hermano Enrique II y después sus sobrinos Juana de Albret y Antonio de Borbón recobrasen el reino de Navarra o al menos fuesen reconocidos como reyes de Navarra francesa obteniendo una compensación por parte del rey de España. Trento, Flandes, España y Roma fueron los destinos de sus reiterados viajes, si bien en algunos de ellos le movía también la consecución de alguna prebenda personal, como el acceder al priorato de Roncesvalles, que aseguraba haberle otorgado el emperador Carlos V; este pretendido derecho nunca fue reconocido por Felipe II, quien rechazó todas sus solicitudes para que fuesen reconocidos los derechos de sus sobrinos a la corona de Navarra.
Más éxito tuvo Pedro de Navarra en Roma. Tras varias tentativas, el papa Pío IV lo recibió en consistorio público el día 14 de diciembre de 1560 como embajador de los Reyes de Navarra, que comenzaron a ser vistos en la cancillería pontificia con el mismo rango que los otros soberanos europeos, aunque, realmente, lo que movía a Pío IV a tomar aquella determinación era el ganarse para la causa católica en Francia a los calvinistas doña Juana y don Antonio.
Como premio al éxito de sus gestiones, sus sobrinos obtuvieron para él en 1561 el obispado y condado de Comminges, en la Gascuña. Desde su elevación al episcopado se apreció en don Pedro un progresivo alejamiento de sus actividades políticas. Como obispo, participó, aunque brevemente, en el concilio de Trento; firmó las actas de la sesión XXIII, el día 15 de julio de 1563, como “Petrus Alebretus, episcopus Convenarum, hispanus”.
Mientras se hallaba en Trento, su sobrina doña Juana desencadenó una fuerte persecución contra su persona y su sede episcopal, alegando que se negaba a entregarle la parte convenida de sus rentas, pero en realidad contrariada porque don Pedro se negaba a engrosar las filas de los hugonotes. En varias ocasiones los hombres de doña Juana irrumpieron en tierras de Comminges, profanaron iglesias y mataron a fieles católicos; él mismo corrió serios peligros de muerte violenta.
Estas contrariedades le llevaron a renunciar a su obispado y retirarse a Estella, dónde falleció en 1569.
*1567.
En los siglos XIV y XV el obispo de Bayona tuvo asiento por derecho propio en el brazo eclesiástico de las Cortes de Navarra. Con la incorporación de este reino a la Corona de Castilla se hizo cada vez más difícil la continuidad de aquella inadecuación secular entre las fronteras políticas y las eclesiásticas. A instancias de Carlos V, el papa León X creó sin éxito (hacia 1517-1520) con aquella zona, ajena a la soberanía francesa, una vicaría nullius que debía regir un abad español. Tampoco se hizo realidad una bula de Clemente VII (1524) ya que contemplaba su incorporación a la mitra pamplonesa. Las guerras de religión francesas y, en particular, la extensión del calvinismo por Gascuña contribuyeron a un replanteamiento urgente del problema. Ante las reclamaciones de Felipe II el papa Pío V arbitró una solución teóricamente transitoria (30.4.1566): en tanto subsistiera el peligro de contagio herético, se nombraría un vicario español para las comarcas controvertidas. No se conformó, sin embargo, el monarca español y, al año siguiente, un 15 de julio de 1567, ordenó taxativamente al obispo de Pamplona que se hiciera cargo de la jurisdicción sobre el arciprestazgo de Fuenterrabía, el arcedianato de Baztán (integrado por los arciprestazgos de Baztán, Cinco Villas y Santesteban) y, por otra parte, la parroquia de Valcarlos. Quedó luego sin ningún efecto un breve del papa Gregorio XIII (1582) exigiendo el cumplimiento de la solución acordada por su predecesor Pío V. Aún se procedió en 1961 a un último retoque: la sede pamplonesa transfirió a la de Bayona y a su parroquia de Arneguy el barrio de Ondarola situado en Francia, pero perteneciente todavía a la parroquia de Valcarlos; y recibió a su vez, las casas de Paris, emplazadas en territorio español y vinculadas hasta entonces a la parroquia bayonesa de Lasa.
*1616.
Siempre se ha intentado mantener los alimentos y bebídas frescas en verano, aunque sea difícil. La gente pudiente se hacían traer nieve desde las numerosas neveras de Navarra, que solían ser agujeros cubiertos (a veces por una edificación o casa) en los que se introducía la nieve y el hielo en invierno para poder ser utilizada en verano. En la Ribera, el clarete con nieve tenía fama. El ayuntamiento de Tudela decidió pagar a un maestro de Gramática con lo recaudado por un canon especial sobre la nieve, incluyendo en su pago a los clérigos de la ciudad, lo que era insólito y revolucionario, ya que la iglesia estaba exenta de pago de impuestos.
Al cabildo de la catedral y a los párrocos no les sento muy bien la medida. El cabildo decidió comprar por su cuenta la nieve, evitar el pago del canon, e incluso venderla. El ayuntamiento decidió detener a quien la comprara, los eclesiásticos amenazaron con excomuniones y con negar la entrada a misa a concejales y alcalde.
El teniente de alcalde se enteró que el 15 de julio iba a entrar un galera con nieve para la curia, se propuso impedir el paso cerca del hospital, donse se produjo un pequeño enfrentamiento entre los canónigos que querían que el carro entrara y los empleados municipales, que lo impedíanb. Las mulas intenaron ir hacia atrás, pero toda la nieve cayó en una acequia y se desparramó por el suelo.
Ése día los muetes tudelanos pudieron tirarse bolazos de nieve en pleno julio, mientras ayuntamiento y eclesiásticos andaban a la rencilla.
*1808.
El 2 de julio de 1808, antes de concluir la Asamblea de Bayona, el Rey José de Bonaparte notifica a la Diputación del Reino, a través del virrey de Navarra, que por la renuncia de Carlos IV y Fernando VII la Corona de España había recaído en su persona, por lo que había resuelto que se le reconociese y proclamase en Navarra, como rey de España y de las Indias en el término de 4 días. La Diputación, reunida en Pamplona el 15 de julio, se disculpó de no poder hacerlo, ya que no tenía autoridad suficiente, porque debían ser las Cortes reunidas con sus tres estados las que podían reconocerle plenamente. La Diputación defendía así la necesidad de respetar los fueros. Además, para reconocerle como rey de Navarra, antes era preciso que José jurase respetar los fueros en los términos enunciados en el título 1.º de la Novísima Recopilación. Tampoco el momento era el más oportuno, ya que antes había que proclamar la Constitución de Bayona. En realidad la Diputación estaba dando largas al reconocimiento del rey José. La Diputación no tuvo más remedio que abandonar Pamplona a finales de agosto de 1808. A partir de este momento las instituciones navarras se afrancesan, algunos cargos son ocupados por afrancesados procedentes de otras provincias, generalmente castellanas (Madrid y Burgos)
*1904.
En Estella, el Asilo de San Jerónimo fué constituido el 15 de Julio de 1904 por voluntad testamentaria.
*1910.
El 15 de julio de 1910 el Boletín Oficial de Navarra publicó que la Diputación, tras consultar a Campión, Olóriz y Altadill sobre la materia, color, adorno, forma y tamaño de la bandera, acordó ordenar su confección con tela roja, del tamaño de las banderas nacionales destinadas a ondear en edificios públicos, y con las cadenas del escudo y sobre ellas la corona real, bordadas o pintadas de oro, más la esmeralda en el centro de las cadenas.
También dispuso que se izase en el balcón principal del Palacio provincial, por primera vez, el 16 de julio en conmemoración de la batalla de las Navas y todos los años ese mismo día y en determinadas fiestas religiosas. También ordenó la construcción de una bandera portátil. La Diputación aceptó el modelo de bandera, la enseña portátil, su uso y las efemérides religiosas. Además, acordó su izada junto a la bandera española los días de fiesta nacional, cómo guipuzcoanos y catalanes.
Ese día El Eco de Navarra y Diario de Navarra anunciaron la primera izada de la bandera. Era provisional, con el escudo pintado por Ciga. Añadían que los “buenos navarros” acogerían con “simpatía” la iniciativa
*1963.
En Rada la Cooperativa agrícola San Nicolás aprobada el 15 de julio de 1963.
*1979.
Fallece en Pamplona el 15 de julio de 1979 el escritor, José M.ªBaroga
Seudónimo de José María Goñi Zubillaga, autor de Latidos de una ciudad y dedicada por quinquenios al período 1945-1960 de Pamplona;
La vida íntima de Pamplona (1973, 1974, 1975 y 1976) y de Eternos Sanfermines (1978).